Alberto L. D'Andrea
El Cronista. 11/11/2005
La humanidad enfrenta hoy cuatro crisis: la mengua de las reservas de energía no renovables de la tierra, una peligrosa acumulación de gases que conducen al calentamiento global, un declive constante de la diversidad biológica y un crecimiento incesante de la población mundial. En esta coyuntura crítica se comienza a gestar una forma revolucionaria de organizar el planeta: la biotecnología. Su magnitud es tal que alterará de manera fundamental la relación de la humanidad con su medio.
A la Biotecnología le corresponde la difícil tarea de “reinventar” la naturaleza y de “rehacer” el mundo. En esta nueva Era de la Biotecnología confluyen una serie de fuerzas tecnológicas y sociales que crean una matriz operativa para grandes cambios económicos y sociales.
El nuevo escenario bioeconómico se apoya sobre la capacidad de aislar, identificar y recombinar genes de modo que por primera vez podamos disponer del acervo genético como materia prima básica de la actividad económica futura. La concesión de patentes sobre genes, líneas celulares, tejidas, órganos y organismos sometidos a la ingeniería genética y los procesos que se emplean para alterarlos da a los mercados el incentivo comercial para explotar nuevos recursos.
La mundialización del comercio y los negocios hacen posible una nueva y completa siembra de la biosfera terrestre con una génesis concebida en el laboratorio, una naturaleza bioindustrial producida artificialmente y destinada a reemplazar la pauta evolutiva destruida de la naturaleza. El mapa de los aproximadamente 25.000 genes que comprende el genoma humano y los nuevos avances como los biochips, las terapias génicas y la ingeniería genética de las células humanas primarias preparan el camino para una especie humana longeva y el nacimiento de una civilización eugenésica, impulsada por la economía. Los nuevos estudios científicos sobre la base genética de la conducta humana y la nueva sociobiología ofrecen un contexto cultural para la aceptación general de las nuevas biotecnologías. El desarrollo informático proporciona herramientas para descifrar, extraer, catalogar y organizar la información genética, y crear así un nuevo fondo de capital genético para su uso en la era bioindustrial que se avecina. Las técnicas de la computación y la genética se funden en una nueva y poderosa realidad biotecnológica, que permitirá encontrar soluciones a los problemas provocados por la Era Industrial.
No es la Biotecnología la que viene a provocar trastornos en nuestra vida o al equilibrio de nuestro ecosistema. Por el contrario, es la Biotecnología la única que puede y debe dar respuesta a través del aprovechamiento de las herramientas de la naturaleza al costo irreversible de la Era industrial. No debemos temer al futuro biotecnológico: deberíamos temer no tener alternativas para solucionar los desequilibrios producidos por la Era Industrial que llevan a una drástica disminución de los recursos y acentúa el desequilibrio del ecosistema.
En medio del panorama expuesto, muchos países en vía de desarrollo comprenden que están frente a una nueva línea de partida y evalúan sus posibilidades en el naciente contexto económico que se avecina. Los recursos humanos y naturales parecieran nivelarse con los económicos en el punto de partida. Nuestro país los tiene y es pionero en áreas biotecnológicas como la agrícola y la médica. Contamos con universidades que generan los recursos humanos suficientes. Debemos tomar conciencia que la formación universitaria debe proveer no sólo emprendedores de la Biotecnología, futuros gerentes, personal de investigación y desarrollo, producción, calidad y comercialización; sino también individuos que puedan definir y modificar el marco regulatorio y desarrollar políticas públicas y programas de educación científico-tecnológica para lograr el desarrollo armónico de esta industria.
Es hora que todos los sectores aúnen esfuerzos para potenciar el desarrollo de esta área productiva. La Era Biotecnológica no es una ficción, cuanto antes lo comprendamos y actuemos en consecuencia, antes le daremos una meta consistente a nuestras nuevas generaciones.
Excelente la nota. Es muy importante que nosotros los biotecnologos, biologos, genetistas, bioquimicos, etc difundamos esta realidad que se avecina de forma tal que la poblacion de nuestro pais este al tanto de la importancia de impulsar este area en un momento clave como este. Como bien explica la nota estamos "frente a una nueva linea de partida" que, si se toman las medidas necesarias, podria permitirnos desarrollarnos y crecer, no solo trayendo beneficios a la comunidad cientifica si no a todo el pais.
ResponderEliminarCreo que es nuestra obligacion como cientificos (si se me permite el uso del termino) divulgar esta informacion y adecuarla para el correcto entendimiento de todas las personas, ya que es la unica manera (mediante el apoyo de toda la comunidad) en que se puede lograr que nuestros politicos comprendan la importancia de desarrollar este area mediante la creacion de nuevas leyes y fondos para fomentar la investigacion.
Alejandro Garcia