En el artículo Tiempo de Nanoeconomía decíamos que la nanoeconomía se fundamenta en tratar la de visibilizar las necesidades económicas de cada persona e individualizarlas para brindar las respuestas necesarias. La economía y lo ambiental están sin rumbo en la actualidad. Por un lado los procesos económicos han perdido el contacto con su base natural al centrarse en la dinámica de los mercados, el aumento en la producción y priorizar aspectos comerciales. Por el otro han perdido contacto con las necesidades humanas con una peligrosa tendencia al desempleo crónico y aumento de la pobreza. En el contexto citado uno de los pensadores más notables y profundos de la economía Nicolás Georgescu-Roegen ha expresado “Los fenómenos económicos ciertamente no son independientes de las leyes físico-químicas que gobiernan nuestro medio ambiente” marcando el límite y la inconveniencia de la economía vigente centrada en el divorcio entre las teorías económicas y el cumplimiento de las leyes de la naturaleza.
La respuesta sustentable de las tecnologías convergentes a los problemas del mundo actual.
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lunes, 4 de diciembre de 2023
La economía de las nuevas tecnologías
Divorcio conducente a un planeta a la deriva en lo económico y ambiental. A la problemática planteada por Nicolás Georgescu-Roegen en su economía física (debido a su su obra magna publicada en 1971: “The Entropy Law and the Economics Process”) le aparecieron dos respuestas vinculadas a la capacidad de las nuevas tecnologías para transformar la naturaleza y rehacer las pautas perdidas (en 1973 la biotecnología y en 1974 la nanotecnología). Ambas han dado origen a la bioeconomía y a la nanoeconomía. La bioeconomía, es una economía basada en la biotecnología con habilidad para generar en tiempo y forma los recursos naturales renovables, con su acervo de 65 millones de genes y la ingeniería genética, para dar respuestas a necesidades socio-económicas tales como la demanda de energía, alimentos, disminución de los gastos en salud y cuidado del medio ambiente, generando a su vez trabajo e ingresos en forma sustentable.
La nanoeconomía es una economía construida a partir de las necesidades y el quehacer diario de los 7800 millones de personas habitantes del planeta en vez del resultado del accionar de países o empresas.Tanto la nanotecnología como la biotecnología se complementan e integran, además con la infotecnología permiten avanzar en una simbiosis coordinada hacia el desarrollo de la cognotecnología. Al conjunto se lo conoce como nuevas tecnologías o NBIC (Nano, Bio, Info y Cognotecnologías). Las cuatro dan origen a un espectro más amplio y al paso de la nanobioeconomía a la economía de las nuevas tecnologías.
La economía de pensamiento único con predominio de lo económico sobre lo social-político, globalizada, centrada en el mercado y utilización activa de los medios de comunicación, resulta inadecuada para dar respuestas necesarias ante el crecimiento exponencial de la población, lo que conlleva a desequilibrios económicos, ecológicos y sociales conducentes a un ascenso de lo irracional. En cambio, la economía de las nuevas tecnologías, nos da un nuevo y único enfoque para tratar de alcanzar un equilibrio sólido, sustentado por las leyes de la naturaleza y las necesidades de los habitantes de la tierra.
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domingo, 29 de abril de 2018
BioNanoarquitectura.
La premisa sustentada por la Bionanoarquitectura es que la vida responde mejor a diseños y materiales concordantes con la preservación de la naturaleza de los habitantes y de la naturaleza del medio, de modo de hacer más armónica y sustentable la existencia.
Un punto de inflexión dentro de la biotecnología moderna se produce con la presentación en el año 2000 de los datos del Proyecto Genoma Humano. El conocimiento del mapa genético humano ha brindado por primera vez en la historia la posibilidad de disponer del acervo genético como materia prima básica de la actividad socioeconómica del presente y del futuro. El conocimiento del genoma humano, desde el nacimiento, permitirá detectar nuestra tendencia genética a cierto tipos de actitudes-enfermedades para las cuales se deben adaptar las características de las viviendas y no forzar al individuo a los diseños arquitectónicos contra su natural tendencia genética.
Con el transcurso del tiempo se comprendió la necesidad de conocer un aspecto complementario de nuestro genoma. En las distintas partes del ser humano existen microorganismos tales como bacterias y hongos desarrollados en una relación íntima con el cuerpo. Ellos superan aproximadamente en 100 veces la cantidad de nuestras propias células. La sociedad formada por los microorganismos y los humanos produce un beneficio mutuo. El estudio global de secuenciación del genoma de la comunidad de microorganismos presentes en la microflora se centra en un nuevo campo biotecnológico: la metagenómica humana. Su propósito es proporcionar una visión amplia centrada en el descubrimiento de genes de interés especial en las comunidades microbianas relacionados con nuestro estado de salud y enfermedad. En la actualidad, el proyecto del microbioma humano se suma al del genoma humano ampliando de ese modo el acervo genético referencial sobre estado de salud de una persona en relación con su medio. La microflora humana es la interfase con la microflora de nuestro hábitat, susceptible a los grandes cambios medioambientales producto de la actividad del hombre.
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Bionanoarquitectura. Alberto L. D'Andrea. El Cronista. 29/06/2009 |
La nanotecnología nos puede ayudar a mantener un hábitat equilibrado a través de la utilización de nanomateriales tendientes a lograr un máximo aprovechamiento de los recursos naturales sin producir desequilibrios que repercutan en la metagenómica del lugar y en definitiva en su fino equilibrio con nuestra salud. También la nanotecnología puede dar respuesta a múltiples necesidades ambientales y a ciertos genes vinculados con distintas problemáticas humanas usuales (ansiedad, depresión, stress, abatimiento, etc.).
Sólo citaremos unos pocos ejemplos. Pinturas nanotecnológicas con cierta especifidad antibacteriana destinadas a eliminar microorganismos que puedan afectar la bioflora normal. Pinturas adicionadas con nanoesferas cerámicas capaces de disminuir la conducción térmica aumentando la capacidad reflectiva de las superficies mejorando la aislación de la vivienda y por ende disminuyendo el consumo de energía destinada para refrigerar o calefaccionar en un 20%. Pinturas, para ansiosos, que cambian el color de la pared durante el día según el ángulo de incidencia de la luz. Desde lo ambiental, la nanotecnología, también permite construir paneles solares diurnos más eficientes, paneles solares nocturnos hechos con nanocristales nanométricos capaces de absorber y funcionar con la radiación infrarroja que durante la noche se refleja desde las nubes (efecto invernadero) y pintura catalítica capaz de convertir el monóxido de carbono a dióxido de carbono.
Imaginemos que pronto, alguien que viva en un departamento muy pequeño, en condiciones contrarias a su tendencia natural, podrá tener una pantalla girante muy finita en su pared (tipo OLED) y le bastara con seleccionar dónde quiere estar (servicio de nanocámaras incluido). Tomando una cerveza (en su departamento) pero mirando en tiempo real el entorno en el bar Palentino en Madrid, o tomar un café mirando a su alrededor o por una ventana la gente pasar en tiempo real en el café Tortoni de Buenos Aires, o almorzar mirando las cataratas del Niágara desde Estados Unidos o Canadá o el rompimiento del glaciar Perito Moreno en la provincia de Santa Cruz (Argentina),...
Conocer nuestro genoma hará posible detectar nuestra tendencia a ciertos entornos compatibles; a una arquitectura centrada en las necesidades genéticas individuales de modo de que la nurtura respete a la natura, no imponiéndole una adaptación artificial tras la apariencia de un forzado equilibrio condenado al fracaso emocional. La interacción dinámica entre la nanotecnología y la biotecnología nos dará las herramientas necesarias para la comprensión profunda e integral del ser humano y nos brindará herramientas para incidir subjetiva y objetivamente en el arte y la técnica de la construcción.
La producción arquitectónica basada en la biotecnología y la nanotecnología correlaciona objeto, medio y sujeto en una relación sinérgica y dinámica. La Bionanoarquitectura finalmente se podría visualizar como la contribución de la biotecnología y de la nanotecnología a la arquitectura para mejorar las condiciones de habitabilidad del planeta.
Lectura complementaria:
Casas hechas a medida (de nuestros genes).
Nota: el presente artículo es una actualización del publicado en El Cronista el 9 de junio del año 2009.
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martes, 24 de marzo de 2015
Bioeconomía y Nanoeconomía.
La bioeconomía y la nanoeconomía ¿tienen algo en común?
Recordemos sus fundamentos. La bioeconomía es la respuesta de la biotecnología a las problemáticas detectadas por la economía física tales como: el aumento de la población mundial de 2500 a 7000 mil millones de habitantes entre el año 1950 y el 2013, aproximación a la “carga máxima de la tierra” (10.000 millones de habitantes), fuerte incremento en la demanda de energía y alimentos, aumento de la contaminación en general producto de la mayor cantidad de habitantes y de la actividad del hombre, peligrosa acumulación de gases que conducen al calentamiento global; agotamiento de la energía fósil-extractiva, antes abundante-barata y declive constante de la diversidad biológica ante la apropiación de más espacios físicos por el hombre. En tal sentido, hoy podemos definir a la bioeconomía real como una economía basada en la biotecnología capaz de generar en tiempo y forma los recursos naturales renovables, con su acervo de 65 millones de genes y la ingeniería genética, para dar respuestas a necesidades socioeconómicas tales como la demanda de energía, alimentos, disminución de los gastos en salud y cuidado del medio ambiente, generando a su vez trabajo e ingresos en forma sustentable.
La nanoeconomía surge para llenar en vacío luego de la sucesión macroeconomía – microeconomía. El faltante es una nanoeconomía, una economía centrada en el individuo y en su acontecer económico. Una economía construida a partir de las necesidades y el quehacer diario de los 7000 millones de personas habitantes el mundo en vez del resultado del accionar de regiones, países, empresas globalizadas o intereses sectoriales. Decíamos en el artículo Nanoeconomía & Nanotecnologia (Biotecnología & Nanotecnologia al Instante, 20 de diciembre del 2014): “La nanotecnología y la nanoeconomía (y agregamos ahora a la biotecnología y a la bioeconomía) convergen en construir desde la esencia de la vida misma con la convicción que desde lo pequeño se puede avanzar para comprender el todo, pero desde el todo tal vez sea dificultoso o casi imposible comprender y penetrar en el mundo de lo pequeño. Tal como lo hace la bioeconomia, capaz de subordinar la economía macro y micro a las leyes de la naturaleza; la nanoeconomía subordina la construcción del mundo económico a las necesidades de cada uno de individuos de planeta. Una construcción difícil, más aún cuando nunca se intentó “visualizar a todos” desde la economía de pensamiento único, pero posible y no más dificultosa que las construcciones nanotecnológicas hoy factibles y en continuo desarrollo”.
La nanoeconomía surge para llenar en vacío luego de la sucesión macroeconomía – microeconomía. El faltante es una nanoeconomía, una economía centrada en el individuo y en su acontecer económico. Una economía construida a partir de las necesidades y el quehacer diario de los 7000 millones de personas habitantes el mundo en vez del resultado del accionar de regiones, países, empresas globalizadas o intereses sectoriales. Decíamos en el artículo Nanoeconomía & Nanotecnologia (Biotecnología & Nanotecnologia al Instante, 20 de diciembre del 2014): “La nanotecnología y la nanoeconomía (y agregamos ahora a la biotecnología y a la bioeconomía) convergen en construir desde la esencia de la vida misma con la convicción que desde lo pequeño se puede avanzar para comprender el todo, pero desde el todo tal vez sea dificultoso o casi imposible comprender y penetrar en el mundo de lo pequeño. Tal como lo hace la bioeconomia, capaz de subordinar la economía macro y micro a las leyes de la naturaleza; la nanoeconomía subordina la construcción del mundo económico a las necesidades de cada uno de individuos de planeta. Una construcción difícil, más aún cuando nunca se intentó “visualizar a todos” desde la economía de pensamiento único, pero posible y no más dificultosa que las construcciones nanotecnológicas hoy factibles y en continuo desarrollo”.
Pensemos un 2015 en el cual el avance tecnológico en lo productivo genera el contexto necesario para encontrar el rumbo alternativo que el mundo reclama.
Un 2015 para comenzar a mirar desde lo pequeño.
Un 2015 para comenzar a mirar desde lo pequeño.
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